Alguna vez te has preguntado ¿Por qué elegir una sartén de acero inoxidable?
Cuando pensamos en sartenes para nuestra cocina, inmediatamente nos vienen a la mente los modelos antiadherentes: “no se pega nada”, “ideal para cocinar sin grasa”, etc. Pero desde hace años ha habido un resurgir del interés por las sartenes de acero inoxidable y no es casualidad. En esta entrada te explicamos por qué, para muchos usos, pueden superar a las opciones con recubrimiento, y qué hace especial a nuestra Sartén de Acero Inoxidable Triply Natural sin antiadherente. La sartén de la que te hablamos es esta: Sartén Triply
Antes de compararlas con otras sartenes, conviene conocer bien las cualidades de la que quieres destacar:
- Está fabricada en material tricapa: acero inoxidable en las capas exteriores + aluminio en el interior, para asegurar una distribución uniforme del calor por toda la superficie del cuerpo.
- No tiene recubrimientos ni químicos: es libre de PFOA y PTFE, los cuales son materiales comunes en recubrimientos antiadherentes.
- Su mango es de acero inoxidable y con aislamiento térmico, para facilitar su manejo sin quemaduras.
- Es apta para todo tipo de cocinas (inducción, gas, vitrocerámica, horno) gracias a su construcción. Además , es de fácil limpieza y mantenimiento.
Estas características ya marcan una diferencia con muchas sartenes comunes.
Veamos algunos mitos sobre las sartenes de acero inoxidable que conviene aclarar:
- “El acero inoxidable se pega siempre, no vale para cocinar sin grasa”: No necesariamente. Aunque no “resbala” como lo hace un antiadherente, con buen control de temperatura, uso de aceite/grasa y paciencia, puedes lograr que prácticamente nada se quede pegado. Cuando la sartén está bien precalentada y el alimento no está húmedo en exceso, el acero puede liberar fácilmente.
- “Es muy pesada”: Esto depende del diseño: el uso de capas intermedias de aluminio (como en la Triply) aporta ligereza relativa y buena conducción del calor.
- “Requiere mucho mantenimiento”: Puede requerir más atención que un antiadherente barato, pero con hábitos adecuados (limpiar pronto, no usar productos excesivamente agresivos, secar bien) su mantenimiento no es excesivo y, además, una sartén de acero inoxidable te puede durar muchísimos años.
¿En qué casos la sartén de acero inoxidable marca la diferencia? Hay situaciones en las que el acero inoxidable sobresale:
- Preparar carnes / sellado: para sellar filetes, pechugas, escalopes, la capacidad de subir la temperatura y mantenerla es clave. Un antiadherente puede no permitir ese dorado intenso.
- Derrames ácidos: si cocinas con tomate, vino, cítricos, etc., el acero inoxidable es más resistente a la corrosión frente a recubrimientos que pueden alterarse con los ácidos.
- Uso frecuente / a largo plazo: si estás buscando una sartén que dure 10–15 años, una de buena marca en acero inoxidable bien cuidada puede superar a muchas sartenes con recubrimiento barato.
- Salud / seguridad: dado que no hay recubrimientos químicos que puedan degradarse, reduce el riesgo de ingestión de partículas del recubrimiento.
- Versatilidad de uso: apta para horno, grill, inducción, etc., lo que la convierte en una opción “todoterreno” en la cocina.
Algunos trucos para elegir tu sartén de acero inoxidable:
- Precalienta bien: antes de incorporar el alimento, deja que la sartén alcance la temperatura adecuada.
- Aceite o grasa moderada: no necesitas una capa excesiva, pero sí algo de grasa ayuda a evitar pegado y mejora la cocción.
- Evita cambios bruscos de temperatura: no meter una sartén muy caliente directamente bajo agua fría, ya que puede deformarse.
- Limpieza adecuada: remoja si hay residuos difíciles, usa estropajos no demasiado agresivos y seca completamente después de lavar.
- Pulido ocasional: si pierde brillo, es posible devolverle un poco de lustre con productos específicos para acero inoxidable (siguiendo siempre las recomendaciones del fabricante.
Conclusión
Si buscas una sartén duradera, versátil, que te permita cocinar con libertad, y en la que no dependas de recubrimientos químicos frágiles, la Sartén de Acero Inoxidable Triply Natural sin antiadherente es una apuesta sensata. Permite cocinar con altas temperaturas, usarla en horno, resistir el paso del tiempo y mantener un rendimiento culinario excelente.
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